Una de las máximas del marketing digital afirma que cuesta mucho ganar un seguidor como para perderlo en cuestión de segundos. Y es que está claro que todos cometemos errores, incluso las empresas a la hora de gestionar -tanto de forma directa como externa- sus redes sociales, por eso nada mejor que tener en cuenta estas 10 maneras de lanzar todo el esfuerzo por la borda.
Si tienes una página de empresa, la imagen de ésta debe ser políticamente correcta.
No hay más. Podemos usar un lenguaje más o menos coloquial o compartir depende de qué información pero ojo, siempre todo bajo unos criterios mínimos y unos “modales online” que nuestros seguidores agradecerán.
Con lo que cuesta ganar seguidores, y lo rápido que podemos llegar a perderlos si cometemos errores como estos. Un consejo: antes de escribir, párate a reflexionar, cuenta hasta tres y sobre todo que prevalezca la inteligencia en tu forma de actuar y contestar. La imagen de tu marca está en juego y ojo, también tus beneficios. Ten en cuenta este decálogo de cómo no fastidiarla en redes sociales.
- No es tu perfil personal. Suele ocurrir que aquellas empresas donde sus redes sociales no se gestionan de manera profesional por un equipo de marketing o un profesional externo, quienes actualizan las redes piensen que se tratan de redes sociales personales entrando en trifulcas, compartiendo contenido personal y que poco tiene que ver con la empresa.
- Entrar en temas políticos. La actualidad política siempre es cargante y opinar sobre asuntos relacionados con algún tema polémico significa posicionarse. Esto puede perjudicar seriamente la imagen de la empresa en redes sociales que puede ver como diezman sus seguidores en cuestión de minutos…
- Cuidado con los concursos. En los concursos y sorteos siempre ha de haber total transparencia. Por ello es mejor que dejes las reglas del juego claras y que se elija al ganador de forma transparente y objetivo.
- Imágenes de poca calidad. Compartir imágenes de mala calidad de nuestros productos, pixeladas o diminutas es poco serio. Va en contra de nuestra imagen pudiendo echar para atrás a muchos usuarios que quieren seguirnos.
- Mentiras. El usuario en redes sociales no soporta las mentiras y si eres proclive a ellas para engañarle y lograr un impacto mayor, vas por mal camino. Las falsas promociones, hablar sobre que tu producto o tu servicio tiene tal o cual característica que es la mejor del mercado y es incierto… al final tu seguidor se da cuenta de estas cosas.
- No seas egoísta. No uses tus redes sociales como canales de televenta porque lo que estarás haciendo es ahuyentar a tu público. Al final o se darán de baja de tus redes o ocultarán tus actualizaciones, que para el caso es lo mismo. Comparte algo más que tus productos en redes sociales.
- La importancia de la gramática. Escribir bien en redes sociales es imprescindible, así como saber usar los diferentes signos ortográficos. No abuses de mayúsculas (simulan que gritas), ni de los signos de exclamación y usa un lenguaje correcto, cercano y coloquial sin caer ni en vulgarismos ni en tecnicismos enciclopédicos.
- No entres en discusiones. Es mejor “tragarte” lo que piensas en redes que escupirlo en el muro de tu empresa. Ante discusiones, contesta educadamente. Y ante insultos, ignoralos y haz como si nada hubiera ocurrido. Y sólo en casos extremos, y siempre que se haya dejado claro el motivo previamente, entonces borra o elimina.
- Ritmo de actualizaciones. Conseguir la fidelidad en tus redes sociales también es importante, y en ocasiones complicado, por eso es mejor que publiques periódicamente y que no pasen meses entre una publicación y otra. Si no el impacto de las mismas disminuirá.
- Pasando de tu público. Ignorar los mensajes privados, los comentarios y las notificaciones es un grave error, nunca sabes dónde puedes encontrar un cliente y qué duda cabe que la atención al cliente personalizada es una de las bases de las redes sociales corporativas. ¡No lo olvides!